Madrid cuenta también con una importante tradición repostera. Algunos de ellos se preparan en fechas especiales, mientras que otros se consumen todo el año. Te contamos algunos de nuestros secretos más dulces:

El roscón de reyes, típico de dicha celebración, el 6 de enero. Se trata de un bollo preparado con azahar y decorado con fruta escarchada. Se puede encontrar sólo o relleno de nata, crema o chocolate. La tradición es esconder dentro del roscón un regalo y un haba. A quien le toque el regalo la suerte le acompañará, mientras que quien encuentre el haba será el encargado de pagarlo.

Los panecillos de San Antón. A mediados de de enero, muchos madrileños acuden a la iglesia de San Antón buscando la bendición de sus mascotas por parte de San Antón Abad, protector de los animales. Estos panecillos, más parecidos a pastas que a panes, son típicos de ese día.

Las torrijas. Es el dulce típico de Semana Santa en toda España. Se trata de rebanadas de pan empapadas en huevo, leche o vino y cubiertas con miel.

Las rosquillas de San Isidro. El 15 de mayo se celebra en Madrid San Isidro. En la ermita dedicada al santo se toman estas rosquillas que se acompañan con el agua de la fuente de San Isidro. Hay dos tipos de rosquillas, las listas, cubiertas de azúcar, y las tontas, a las que no se les pone nada.

Los huesos de santo. Son canutillos preparados con almendras. Se toman el 1 de noviembre, día de los Santos. Pueden tener rellenos de muchos sabores: chocolate, crema, coco …

Los buñuelos de viento. También son típicos del día de los Santos. Se trata de pequeños y suaves bollitos rellenos de nata o crema.

Los churros. Uno de nuestros dulces más castizos. Masa frita frita en aceite, espolvoreada con azúcar y a las que se da forma de lazo. Se suelen tomar acompañados de chocolate.

Los barquillos. Por desgracia los antiguos barquilleros se encuentran en vías de extinción. Hasta no hace demasiado era habitual verlos por las calles con un bidón que en la parte superior tiene un juego de ruleta que será el que decida quien consigue el barquillo, un dulce fino y crujiente y de formas muy variadas.

Los bartolillos. Otros de los dulces más castizos. Se trata de bollos alargados y fritos en aceite que se rellenan de crema.

Los pestiños. Tambien llamados «fruta de sartén». Tienen origen árabe. Se trata de masa frita recubierta con abundante miel o azúcar.

Y como seguro que despues de leer esto te han entrado unas ganas tremendas de probar estas delicias, no tienes más que venir a El Anciano Rey donde, entre otras muchas especialidades, podrás tomar nuestros famosos pestiños. Te esperamos.