Si la semana pasada te hablábamos de curiosidades hilarantes de Madrid, hoy te traemos la segunda parte debido a la aclamación popular ;-). Vamos a por ellas!

¿Una fuente en el metro?

Seguramente no conoces la Fuente de los caños del Peral, del siglo XVII, situada en los bajos de la plaza de Isabel II, junto al lado del metro de Ópera. En sus orígenes, era parte de unos baños árabes. Junto a ella estaba el acueducto de Amaniel, que suministraba agua hasta el cercano Palacio Real, al lado nuestro. Al hacer obras a principios del siglo XIX, la dejaron oculta durante 200 años. Hasta que hace poco la volvieron a descubrir y ahora forma parte de un pequeño museo arqueológico que merece la pena, al menos, ver.

Calderón de la Barca vivía en la calle más estrecha de Madrid

Con poco más de cuatro metros de ancho, la casa se ha conservado gracias a que allí vivió Calderón de la Barca en 1881. Lo que no nos explicamos es cómo pudo este insigne caballero maniobrar en su interior y realizar sus quehaceres diarios, donde hasta escribir en tan angosta estancia debía parecer una labor de titanes. Está, por cierto, en el número 61 de la calle Mayor.

El Retiro esconde un duende del amor

Imagina… finales del siglo XVIII, Felipe V paseando por el Parque del Retiro, cada día… tantas veces que una leyenda comenzó a instaurarse: se decía que había un duende que cambiaba las flores de sitio cada día para que pareciera diferente. Y de ahí sus múltiples paseso.

Con el paso de los años, la leyenda de que quien viera al duente en el Retiro se convertiría en afortunado en el amor, hizo que José Noja, en 1985, lo hiciera realidad: hoy el duende espera sentado sobre una de las oseras de la casa de las fieras. Si lo encuentras, ya sabes, salúdale de nuestra parte!

La plaza más corta y la calle más pequeña… ¿o al revés?

Un rincón puede que olvidado… pero desde luego escondido. La plazuela de San Javier, en el Madrid de los Austrias: un rincón totalmente recomendable de visitar. Solo lo atraviesa la estrecha calle del Conde. Y la calle más corta es Rompelanzas, entre Preciados y del Carmen. La calle mide apenas unos pocos metros. Ya sabes… si pasas por ellas, fíjate bien, porque seguramente pasarán desapercibidas.

¿Sabes alguna más? Cuéntanoslas!